El espectáculo del medio tiempo del Super Bowl siempre es un evento que causa gran expectativa, pero el que se vivirá el próximo domingo, en la edición LII con la presentación de Justin Timberlake, lo es aún más.
Y es que, aunque ya pasaron 14 años, aún se recuerda la controversia del Super Bowl XXXVIII cuando Justin recibió una multa millonaria debido a que arrancó un pedazo del vestuario de Janet Jackson, descubriéndole el seno derecho en plena emisión.
Ese antecedente ha provocado que el Consejo Televisivo de Padres de Familia solicitara al cantante que: «se comporte durante su espectáculo y elabore un show amigable y seguro para los niños. Positivo, inspirador y entretenido para todos los espectadores».
Cauteloso por las críticas que podría provocar el Super Bowl LII, en rueda de prensa el artista tranquilizó a los espectadores y autoridades afirmando que: «Lo que pasó en el 2004 no ocurrirá esta vez, ni se tendrá sorpresas que generen polémica«.
El intérprete de «Can´t Stop the Feeling» manifestó que su grupo «The Tennessee Kids» será el único invitado que estará en el escenario. Con esto se descartó cualquier posibilidad de que su exbanda NSYNC o Janet Jack- son estén en el US Bank Stadium de Minneapolis.
«Vamos a tomarnos en serio lo que queremos conseguir y es que todos se diviertan mucho. Ese es mi principal objetivo con el espectáculo del medio tiempo», dijo Timberlake.
El estadounidense será el primer artista que se presentará por tercera vez en el medio tiempo de un Super Bowl, donde su primera intervención fue en la edición 35 del 2001.
Por su parte, la cantante Pink será la encargada de entonar el himno de los Estados Unidos.
Miguel Mosqueda Saldivar
Periodista Independiente
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