El segundo debate presidencial en México se llevó a cabo el pasado domingo 28 de abril, centrando la discusión en temas cruciales como el crecimiento económico, el empleo y la inflación
Puntos de Coincidencia entre los Candidatos
Uno de los consensos más significativos entre los candidatos fue la necesidad de asegurar la igualdad salarial entre mujeres y hombres y fomentar la inclusión del talento femenino en el mercado laboral. Este enfoque común subraya la importancia de abordar la equidad de género como un pilar fundamental en la política laboral de México. Además, los candidatos destacaron la importancia del nearshoring como una estrategia clave para aprovechar las oportunidades económicas actuales y futuras.
Xóchitl Gálvez, representando la coalición PAN-PRI-PRD, se comprometió a aplicar rigurosamente el marco legal existente que prohíbe la desigualdad de sueldos por el mismo trabajo entre géneros. Además, propuso la creación de un sistema nacional de cuidados para fortalecer la incorporación del talento femenino al mercado laboral. Gálvez también propuso una medida significativa: la exención del pago de impuestos para las personas que ganan menos de 15,000 pesos al mes, una política que, según ella, beneficiaría a cerca de 20 millones de personas mediante la reorientación del presupuesto.
Por su parte, Claudia Sheinbaum, de la coalición Morena-PT-PVEM, enfatizó que uno de los objetivos clave de su gobierno sería cerrar la brecha salarial entre géneros. Además, propuso la construcción de 10 polos de bienestar y parques industriales para fomentar el empleo y maximizar las ventajas del nearshoring. Sheinbaum también resaltó los avances logrados durante el actual sexenio en política laboral, como los incrementos al salario mínimo y la creación de puestos de trabajo a pesar de las dificultades por la pandemia de COVID-19.
Visión de Jorge Álvarez Máynez
Jorge Álvarez Máynez de Movimiento Ciudadano puso énfasis en la necesidad de reformar la jornada laboral para desvincular las horas de trabajo de la productividad. Propuso elevar el salario mínimo a 10,000 pesos al mes y promover un modelo económico que atraiga inversiones y genere empleos de calidad. Álvarez Máynez también se comprometió a apoyar a las micro, pequeñas y medianas empresas, y destacó su labor legislativa en el reconocimiento de nuevos derechos laborales, como el aumento en el mínimo de días de vacaciones y la implementación de licencias de paternidad.
El segundo debate presidencial mostró un enfoque constructivo hacia la mejora de las condiciones laborales en México, con propuestas concretas de los candidatos para abordar los desafíos económicos actuales. La igualdad de género, el apoyo a las pequeñas y medianas empresas, y las reformas laborales fueron temas destacados que reflejan las prioridades y la dirección que cada candidato propone para el futuro económico del país.
Uno de los puntos más destacados por todos los candidatos fue la igualdad salarial y la inclusión de talento femenino en el mercado laboral. Xóchitl Gálvez subrayó su compromiso con la aplicación efectiva del marco legal existente que prohíbe la desigualdad de sueldos entre mujeres y hombres, complementándolo con la creación de un sistema nacional de cuidados que facilitaría la incorporación de más mujeres al trabajo remunerado. Este enfoque no solo busca justicia salarial sino también un apoyo estructural para que las mujeres puedan participar plenamente en la economía.
Políticas Fiscales y Apoyo Económico
Gálvez también propuso una política fiscal significativa: la exención de impuestos para personas que ganan menos de 15,000 pesos mensuales. Esta medida, según la candidata, beneficiaría a cerca de 20 millones de mexicanos y se financiaría mediante una reorientación del presupuesto. Esta propuesta busca aliviar la carga fiscal sobre los trabajadores de menores ingresos, aumentando su capacidad de consumo y contribuyendo al crecimiento económico.
Por otro lado, Claudia Sheinbaum presentó su visión de crear 10 polos de bienestar y parques industriales. Estos centros serían claves para capitalizar las oportunidades de inversión derivadas del fenómeno del nearshoring, con el objetivo de generar empleo y fomentar el desarrollo regional. Además, destacó los logros del actual gobierno en materia de políticas laborales, incluyendo el aumento del salario mínimo y la generación de nuevos empleos, pese a los retos impuestos por la pandemia de COVID-19.
Jorge Álvarez Máynez enfocó parte de su intervención en la necesidad de actualizar las leyes laborales para reflejar las realidades del siglo XXI, incluyendo el trabajo en plataformas digitales. Planteó la idea de seguridad social para los trabajadores de nuevas modalidades de empleo, como los repartidores, así como mejoras en las condiciones laborales para los trabajadores agrícolas y otros sectores vulnerables.
Reforma de la Jornada Laboral
Álvarez Máynez también abogó por una reducción de la jornada laboral, argumentando que un modelo económico moderno no debería igualar automáticamente las horas de trabajo con la productividad. Propuso elevar el salario mínimo a 10,000 pesos al mes como parte de su estrategia para mejorar las condiciones laborales y garantizar un ingreso digno para todos los trabajadores.
El candidato de Movimiento Ciudadano destacó su compromiso con la creación de un entorno económico que favorezca la inversión y la creación de empleos de calidad. Este enfoque incluye el apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas, que son esenciales para el tejido económico del país.
El segundo debate presidencial ofreció un panorama detallado de las distintas propuestas de los candidatos en relación con el crecimiento económico, el empleo y la inflación. Cada candidato presentó su visión y soluciones específicas para los problemas económicos de México, desde la equidad salarial y la inclusión laboral hasta reformas fiscales y económicas innovadoras. Estas propuestas no solo reflejan las prioridades políticas de cada candidato sino también su enfoque hacia la resolución de algunos de los desafíos más persistentes que enfrenta México en la actualidad. El debate fue una ventana crucial para los votantes, quienes pudieron comparar y contrastar directamente las políticas y enfoques de cada uno, ayudándoles a tomar una decisión informada en las urnas el próximo 2 de junio.
