En los dos recientes años en México se han registrado más de 80 mil casos de grooming (serie de conductas y acciones deliberadamente emprendidas por un adulto para ganarse la amistad de un menor de edad).
Durante el segundo Foro Internacional sobre Violencia en Internet, que se realizó en el Museo Memoria y Tolerancia la semana pasada, el consultor jurídico comentó que los acosadores ocultan su identidad para establecer contacto con los infantes sin levantar sospechas. Por lo general enganchan a quienes están solos, tristes, deprimidos o cuentan con poca atención de padres y familiares.
Generan confianza y tienen lazos emocionales a partir de sus falsas identidades y logran que les envíen imágenes de actos con connotación sexual. Con esto los extorsionan para que manden material cada vez más gráfico, generando un círculo comprometedor que puede llevar a la víctima al suicidio.
Según la organización, en cinco años se detectaron en el país más de 4 mil páginas de pornografía infantil en Internet. Tan sólo en 2013 la Procuraduría General de la República detectó más de 12 mil cuentas personales que exhibían imágenes de explotación sexual de menores de cuatro a 16 años. Además, las niñas y adolescentes de 12 a 13 años son más vulnerables al ciberacoso.