El principal problema en el tema de agresión a periodistas es la impunidad, dado que en tanto los casos no se esclarezcan, permiten condiciones para que se den las agresiones, como en el caso del fotorreportero Rubén Manuel Espinosa Becerril; «por eso condenamos y exigimos a las autoridades capitalinas el esclarecimiento de este homicidio para que no haya impunidad«, afirmó ayer el ombudsman nacional, Luis Raúl González Pérez.
En entrevista, en el Centro Social y Cultural Veracruzano del Distrito Federal, el titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) enfatizó que su asesinato es totalmente reprobable, condenable, «porque afectar la libertad de expresión es afectar los principios de la democracia; no se puede entender una democracia si no hay espacios para que ésta se dé si hay eventos como el que estamos mencionando».
Tras su participación en la puesta en marcha de un conversatorio de cara a la conmemoración del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, el ombudsman nacional pidió a las autoridades que en las líneas de investigación no se descarte las que tengan que ver con su labor periodística. Cuestionado sobre el número de casos ocurridos en la presente administración federal, González Pérez dijo que la CNDH lleva documentados 15 agresiones contra periodistas, por eso lo importante es que todo crimen, desaparición, agresión sea debidamente investigada.
