Un submarino pequeño fue interceptado en aguas internacionales en el área marítima cercana a Corpus Christi, con una carga de 1723 kilos de cocaína.
De acuerdo al reporte de Aduanas y Protección Fronteriza, su unidad de Marina y Aire a bordo de un avión P-3 Long Range Tracker detectó el sumergible.
Después se pidió ayuda al Servicio de Guarda Costas y Fuerza Aérea para montar un operativo que llevo a la detención de la nave.
Los agentes federales sospechaban que el submarino llevaba droga abordo porque son este tipo de naves los que utilizan los carteles para poder transportar narcóticos desde Centro y Suramérica hacia Estados Unidos.
A su vez se señaló que este tipo de sumergibles son rápidos y difíciles de detectar en el agua.
En el operativo fueron arrestados los 3 tripulantes de la nave. No se especificó la nacionalidad de los detenidos pero tendrán que ser presentados en una corte federal en Texas bajo cargos de narcotráfico.