Ante la noticia del exhorto y la pronta devolución de las instalaciones de la UDLAP a la Fundación Jenkins y a toda la comunidad de la universidad, el «rector» Armando Ríos Piter, nombrado por un patronato espurio del gobierno de Puebla, se encuentra asegurando que las puertas de la institución siempre han estado abiertas para llevar a cabo actividades presenciales y que la comunidad de la UDLAP han sido los que «han preferido evitar el regreso a clases».
Por el momento, se ha acordado que el regreso a clases se aproxima y la rectora Cecilia Anaya Berríos, quien fue nombrada por la Fundación Jenkins, es la que será la encargada de llevarlo a cabo.
