En una sorpresiva vuelta de los acontecimientos en Bruselas, la Unión Europea (UE) ha dado el visto bueno a Ucrania para iniciar las conversaciones oficiales de adhesión, desafiando las tensiones con Hungría y enviando un claro mensaje a Moscú.
La cumbre de la UE en Bruselas concluyó con una noticia inesperada en medio de la sombría situación de la guerra entre Rusia y Ucrania. Kiev recibió la aprobación de los líderes del bloque para comenzar las negociaciones formales de ingreso a la Unión Europea, a pesar de las amenazas previas de Hungría de vetar la decisión. Sorprendentemente, Hungría se abstuvo en el último minuto.
«Es una victoria para Ucrania. Una victoria para toda Europa. Una victoria que motiva, inspira y fortalece», expresó el Presidente ucraniano Volodímir Zelenski en su cuenta de Twitter.
El resultado decisivo de la reunión en Bruselas fue inesperado para muchos. Antes de la cumbre de dos días, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, había insistido en que Ucrania no estaba preparada para iniciar las negociaciones de adhesión, considerado el primer paso en un largo, complejo e incierto camino hacia la Unión Europea.
