Nadie contesta. Tras el paso del huracán Irma por Barbuda, la primera de su larga lista de víctimas, desde la isla no hay señales de comunicación. Tras el paso de Irma, Barbuda perdió contacto con el resto del mundo. Las comunicaciones y la energía en esta isla de 1.600 personas sucumbieron casi instantáneamente, bajo el ojo de un huracán más grande que la isla en sí.
La TV de Antigua intentó sin resultados comunicarse con la gente de Barbuda. Recién cuando el primer ministro Gaston Browne aterrizó en la isla entendió la dimensión de la situación: el 90% de Barbuda ya no existe. La devastación se extendió luego por Saint Martin y Saint Barth.
La siguiente y más reciente víctima en la lista de Irma, es Anguilla, un territorio de ultramar británico, donde provocó daños «graves y en algunos lugares críticos». Y al menos una persona murió, elevando a 10 el número total de muertosprovocados por el devastador ciclón.
