México se ha visto obligado a acelerar su cambio hacia las fuentes de energía renovables después de que la invasión rusa de Ucrania provocara un aumento de los costes energéticos mundiales.
México está invirtiendo fuertemente en estas áreas, y planea poner la primera piedra de una planta de energía solar de 1.600 millones de dólares cerca de la frontera con EE.UU. a finales de abril, que tendrá una capacidad instalada de 1.000 megavatios.
El proyecto está situado cerca de Puerto Peñasco, en la transición del desierto al mar, y abarcará 2.000 hectáreas cuando esté terminado.
El estado de Sonora también cuenta con grandes yacimientos de litio para la producción de baterías para vehículos eléctricos, como parte de este nuevo modelo de desarrollo para México impulsado por el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien busca la candidatura en las elecciones presidenciales de 2024.
