Los líderes de la Iglesia buscan diálogo para pacificar la región, pero los grupos criminales se niegan a ceder territorio.
En un intento por buscar la pacificación en Guerrero, los obispos de la región sostuvieron una reunión con líderes de grupos criminales operando en la zona, buscando una tregua que no logró concretarse debido a la negativa de los criminales a ceder territorios. El obispo de la Diócesis Chilpancingo – Chilapa, José de Jesús González, expresó que, a pesar del fracaso, no cesarán en sus esfuerzos por establecer estos diálogos para alcanzar la paz.
Según el obispo, en diciembre del año pasado, antes del recrudecimiento de la violencia, los ministros religiosos intentaron por separado dialogar con diversos líderes del crimen organizado. Aunque se logró cierto avance con uno de los líderes criminales, quienes propusieron dividirse el territorio para lograr una tregua, otros se negaron, complicando el proceso.
El prelado subrayó la necesidad de estrategias alternativas para mediar con estos grupos, destacando que la ambición por el poder, dinero y territorio ha complicado la negociación. Además, hizo un llamado a las autoridades a ejercer sus recursos y poder para evitar el recrudecimiento de la violencia, especialmente en el contexto de las elecciones, donde temen un aumento de crímenes contra candidatos.
El diálogo entre líderes religiosos y criminales para pacificar la región fue iniciado por el obispo emérito Salvador Rangel Mendoza en 2015, pero ha enfrentado críticas y represalias por parte de políticos y autoridades gubernamentales.
